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Los picos de los loros, como se conoce popularmente a los osteofitos que aparecen en las vértebras de la columna vertebral, provocan fuertes dolores de espalda y hormigueo, que pueden aparecer en brazos o piernas.
La enfermedad, científicamente definida como osteofitosis, se llama pico de loro porque cuando se toma una radiografía de columna, tienen la forma de un gancho similar al pico de este pájaro. La osteofitosis empeora con los años y no tiene cura, pero existen tratamientos que pueden incluir analgésicos y fisioterapia para aliviar el dolor.
Síntomas principales
Algunos de los síntomas que pueden indicar la presencia de 'picos de loro' incluyen:
- Dolor severo localizado en la espalda o que se irradia al muslo, especialmente al moverse;
- Sensación de hormigueo en las piernas cuando se desarrolla en la zona lumbar o en los brazos si se localiza en las cervicales;
- Disminución de la fuerza muscular.
Estos síntomas son comunes a otras enfermedades osteoarticulares principalmente de la columna y para confirmar el diagnóstico es fundamental acudir al ortopedista para realizar una radiografía de columna o resonancia magnética.
A través de estos exámenes de imagen el médico detecta el desgaste del disco intervertebral, la aproximación entre las vértebras y la formación de prominencias en la región lateral de las vértebras similares al pico del loro.
Como es el tratamiento
Para aliviar el dolor y las molestias que este problema provoca, el médico puede recomendar el uso de analgésicos y antiinflamatorios, como el diclofenaco. Sin embargo, se debe mantener una postura correcta para no agravar la enfermedad y, en algunos casos, también puede ser necesario someterse a fisioterapia al menos 4 veces por semana para mejorar la postura y disminuir el dolor. Vea cómo no dañar la columna vertebral.
En casos más graves, puede ser necesaria una cirugía para corregir la desalineación de la columna.
Vea en el video algunos consejos que pueden ayudar a aliviar el dolor de espalda en casa:
Como se forman
Debido al envejecimiento y las malas posturas a lo largo de los años, se produce un desgaste en el disco intervertebral que hace que las vértebras se acerquen mucho, dando lugar a la formación de nuevas estructuras óseas que se forman en los bordes de las vértebras. Estas nuevas estructuras se denominan científicamente osteofitos y son una forma en que el cuerpo intenta defenderse.
Los loros suelen ser el resultado de malas posturas durante varios años. Sin embargo, también pueden surgir por problemas como hernias, osteoartritis, escoliosis, enfermedades autoinmunes, como espondilitis anquilosante y artritis reumatoide, por ejemplo.
Este problema es más común a partir de los 45 años debido al desgaste de los discos espinales que ocurre con el envejecimiento. Además, es más frecuente cuando tienes sobrepeso, no practicas actividad física o nunca la has practicado, y ya has sufrido un traumatismo en la columna o si tienes una enfermedad reumática.
Como evitar
Para evitar su formación es importante tomar algunas precauciones, como:
- Mantenga una postura correcta al sentarse, caminar y dormir;
- Evite levantar cargas elevadas;
- Tener un peso adecuado y, si es necesario, adelgazar;
- Practica de forma habitual actividad física, especialmente ejercicios de poco impacto como aeróbic acuático, pilates o ciclismo.
Entonces, para aquellos que ya tienen la columna de un loro en la columna, el mejor consejo es tener cuidado de que no empeore y hacer fisioterapia para reducir el dolor de espalda.