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Los principales síntomas de la esteatosis hepática, que es la acumulación de grasa en el hígado, son molestias abdominales y malestar general, especialmente en alcohólicos mayores de 60 años. Sin embargo, otras causas de la enfermedad incluyen diabetes tipo 2, obesidad, colesterol alto y factores genéticos.
Generalmente, los síntomas del hígado graso pueden aparecer cuando la grasa en el hígado supera el 10%, caracterizándose esteatosis hepática grado 1 o leve, que rara vez presenta síntomas y no causa daño al organismo, siempre que se evite su causa.
Síntomas de esteatosis hepática de grado 2
Los síntomas de la esteatosis hepática de grado 2 o moderada, así como los de grado 3, ocurren con mayor frecuencia e incluyen:
- Cansancio excesivo;
- Malestar abdominal en el lado derecho;
- Malestar general;
- Dolor de cabeza;
- Náuseas, vómitos y diarrea.
Estos signos y síntomas surgen cuando no se evita la causa del problema, provocando una situación marcada con gran acumulación de grasa e inflamación de las células hepáticas.
Es común que los pacientes con hígado graso desconozcan su problema de salud, no solo porque los síntomas son raros, sino porque, cuando ocurren, generalmente no están asociados con problemas hepáticos.
Por lo tanto, el diagnóstico de esteatosis hepática a menudo lo realiza el médico de cabecera, después de un análisis de sangre de rutina o un examen físico con palpación del abdomen. Además, la progresión de la enfermedad puede controlarse examinando la elastografía hepática, que es rápida e indolora.
Tratamiento del hígado graso
El tratamiento de la esteatosis hepática debe realizarse evitando su causa y, por tanto, en el caso de los alcohólicos se inicia el tratamiento con una disminución de la ingesta de alcohol.
Además, durante el tratamiento del hígado graso también es importante:
- Hacer ejercicio regularmente
- Tener una dieta equilibrada y baja en grasas o azúcares;
- Incrementar la ingesta de verduras, carnes magras y frutas;
- Mantenga los niveles de colesterol bajo control.
Cuando el tratamiento no se realiza correctamente y el individuo mantiene la causa de la enfermedad, el exceso de grasa en el hígado puede aumentar y causar un daño grave a las células del hígado, lo que resulta en cirrosis. Obtenga más información sobre cómo debería ser la dieta de grasas hepáticas.
Además, es importante recordar que durante el embarazo, la aparición de grasa en el hígado es una complicación muy grave, que puede provocar la muerte de la madre y del bebé, por lo que aquí se explica cómo identificar sus síntomas.
Para responder a sus preguntas, consulte 7 preguntas comunes sobre la grasa hepática.