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La cirugía para el reflujo gastroesofágico está indicada cuando el tratamiento con medicamentos y cuidados dietéticos no produce resultados y complicaciones como úlceras o el desarrollo del esófago de Barrett, por ejemplo. Por tanto, solo está indicado después de probar otros tipos de tratamiento.
Esta cirugía se realiza bajo anestesia general y a través de pequeños cortes en el abdomen, y la recuperación total toma alrededor de 2 meses, siendo necesario en las primeras semanas alimentarse solo con líquidos, lo que puede llevar a una ligera pérdida de peso.
Consulte las opciones de tratamiento para el reflujo antes de la cirugía.
Como se hace la cirugia
La cirugía de reflujo suele servir para corregir la hernia de hiato, que es la principal causa del reflujo esofágico y, por lo tanto, el médico necesita realizar pequeños cortes en la región entre el estómago y el esófago para realizar la corrección de la hernia.
Por lo general, la técnica que se utiliza es la laparoscopia con anestesia general, en la que se insertan tubos delgados a través de pequeños cortes en la piel. El médico puede observar el interior del cuerpo y realizar la cirugía a través de una cámara colocada en el extremo de uno de los tubos.
Cuando está indicada la cirugía
La cirugía de reflujo está indicada cuando el tratamiento con medicamentos y dieta no da resultados, pero también puede depender del tiempo que el paciente tenga reflujo, la intensidad y frecuencia de los síntomas y la disposición del paciente a ser operado para solucionar el problema. .
Como es la recuperacion
La recuperación de la cirugía de reflujo es rápida, con poco dolor y poco riesgo de infección, y en general el paciente es dado de alta 1 día después de la cirugía y puede volver al trabajo después de 1 o 2 semanas.
Sin embargo, para una recuperación más rápida, se recomienda:
- Evite conducir durante al menos 10 días;
- Evite tener contacto íntimo en las primeras 2 semanas;
- No levante pesas y reanude el ejercicio físico solo después de 1 mes o después del alta del médico;
- Realice caminatas cortas en casa durante todo el día, evitando sentarse o acostarse durante mucho tiempo.
Además, se recomienda regresar al hospital o acudir al centro de salud para tratar las heridas de la cirugía. En los 2 primeros días es importante bañarse solo con una esponja para evitar mojar los apósitos, ya que aumenta el riesgo de infección.
Durante la recuperación, el médico también puede recomendar el uso de antibióticos, antiinflamatorios o analgésicos, para reducir las molestias.
Que comer despues de la cirugia
Debido al dolor y la dificultad para tragar, es recomendable seguir este tipo de esquema:
- Alimente únicamente con líquidos durante la 1ª semana, pudiendo prolongarse hasta la 2ª semana, según la tolerancia del paciente;
- Cambie a una dieta pastosa a partir de la 2ª o 3ª semana, con la ingesta de alimentos bien cocidos, purés, carne molida, pescado y pollo desmenuzado;
- Comience gradualmente una dieta normal, de acuerdo con la tolerancia y liberación del médico;
- Evite las bebidas carbonatadas durante los primeros meses, como refrescos y agua carbonatada;
- Evite los alimentos que producen gases en el intestino, como frijoles, repollo, huevo, guisantes, maíz, brócoli, cebolla, pepino, nabo, melón, sandía y aguacate;
- Come y bebe despacio, para evitar hinchazón y dolor de estómago.
La sensación de dolor y el estómago lleno pueden provocar una pérdida de peso debido a la menor cantidad de alimentos ingeridos. Además, también es común experimentar hipo y gases excesivos, y puede ser necesario tomar medicamentos como Luftal para reducir estos síntomas.
Vea cómo comer una dieta líquida o pastosa para ayudar a que su estómago se recupere.
Posibles complicaciones
La cirugía de reflujo es muy segura, especialmente cuando se realiza por laparoscopia, sin embargo, siempre existe el riesgo de complicaciones como sangrado, trombosis en las extremidades inferiores, infección en el sitio de la incisión o traumatismo en los órganos cercanos al estómago. Además, como se requiere anestesia, también pueden surgir complicaciones relacionadas con la anestesia.
Dependiendo de la gravedad, estas complicaciones pueden derivar en la necesidad de que la persona sea operada nuevamente mediante cirugía convencional, realizada con un gran corte en el abdomen, en lugar del procedimiento laparoscópico.
Señales de advertencia para ir al médico
Además de la visita de regreso, se debe consultar a un médico si hay:
- Fiebre superior a 38ºC;
- Dolor intenso, enrojecimiento, sangre o pus en las heridas;
- Náuseas y vómitos frecuentes;
- Cansancio frecuente y dificultad para respirar;
- Dolor abdominal e hinchazón persistente.
Estos síntomas pueden indicar complicaciones de la cirugía, y debe acudir a la sala de emergencias para tratar y prevenir más complicaciones.
Para evitar la necesidad de una cirugía, consulte cómo deben ser los alimentos para tratar el reflujo y los principales remedios caseros utilizados para esta enfermedad.