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Hacer una buena limpieza de la piel garantiza su belleza natural, eliminando impurezas y dejando la piel más sana. En el caso de pieles normales a secas, es recomendable hacer una limpieza cutánea profunda una vez cada 2 meses, para pieles grasas, esta limpieza debe realizarse una vez al mes.
Las precauciones necesarias para asegurar una buena limpieza de la piel son evitar la exposición solar 48 horas antes y después del tratamiento, para evitar que la piel se manche, utilizar siempre protector solar facial y beber mucha agua para asegurar una buena hidratación cutánea.
La esteticista o dermatólogo podrá indicar su tipo de piel y los productos más adecuados a utilizar, garantizando así la eficacia de la limpieza cutánea, sin descamación ni rojeces. Además, el dermatólogo y esteticista también pueden limpiar la piel, pero de forma profesional, lo que puede tener mejores resultados. Vea cómo se realiza una limpieza profunda de la piel.
1. Limpiar la piel superficialmente
La limpieza casera de la piel debe comenzar por lavarse la cara con agua tibia y un jabón suave. Luego, se debe aplicar una loción desmaquillante para eliminar el maquillaje y las impurezas superficiales de la piel.
2. Exfolia la piel
Pon un poco de exfoliante sobre un algodón y frota, haciendo movimientos circulares, la piel de todo el rostro, insistiendo en las zonas que acumulan más suciedad, como la frente, entre las cejas y los lados de la nariz. Vea una receta de exfoliante de avena casera para el rostro.
3. Limpiar la piel profundamente
Realiza una sauna facial casera y elimina las espinillas y puntos blancos, apretando suavemente la zona con los dedos protegidos con una gasa esterilizada.
Para hacer la sauna facial casera, puedes poner una bolsita de té de manzanilla en un bol con 1 litro de agua hirviendo y doblar la cara bajo el vapor durante unos minutos.
4. Desinfecta la piel
Después de eliminar todas las impurezas de la piel, se debe aplicar una loción con efecto bactericida para prevenir infecciones.
5. Mascarilla calmante
La aplicación de una mascarilla calmante ayuda a limpiar la piel, alivia y previene el enrojecimiento. La mascarilla se puede hacer con productos especializados o caseros, como una mezcla de miel y yogur, por ejemplo, porque es un buen hidrante natural. Aquí se explica cómo hacer la mascarilla facial de miel y yogur.
6. Protege la piel
El último paso de la limpieza casera de la piel es aplicar una fina capa de crema hidratante con protector solar para calmar y proteger la piel.