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La hidrocolontoterapia es un procedimiento de limpieza del intestino grueso en el que se inserta por el ano agua tibia, filtrada y purificada, permitiendo la eliminación de las heces y toxinas acumuladas en el intestino.
Por tanto, este tipo de tratamiento natural se suele utilizar para combatir el estreñimiento y los síntomas de la hinchazón del vientre, sin embargo, también suele estar indicado en preparación para una cirugía o para aliviar los síntomas de enfermedades infecciosas, inflamatorias, reumáticas, músculo y articulación, por ejemplo.
Este procedimiento es diferente al enema, ya que el enema generalmente solo elimina las heces de la porción inicial del intestino, mientras que la hidrocolonoterapia realiza una limpieza intestinal completa. Vea cómo puede hacer un enema en casa.
Hidrocolontoterapia paso a paso
La hidrocolonterapia se realiza con un dispositivo especial que debe ser operado por un profesional de la salud. Durante el procedimiento, se siguen los siguientes pasos:
- Colocación de un lubricante a base de agua en el ano y el equipo;
- Inserción de un tubo delgado en el ano para pasar el agua;
- Interrupción del flujo de agua cuando la persona siente malestar en el vientre o aumento de presión;
- Realizar un masaje abdominal para facilitar la salida de las heces;
- Eliminación de heces y toxinas a través de otro tubo conectado al tubo de agua;
- Abriendo un nuevo flujo de agua hacia el intestino.
Este proceso suele durar unos 20 minutos, tiempo durante el cual se repiten los dos últimos pasos hasta que el agua extraída salga limpia y sin heces, lo que significa que el intestino también está limpio.
Donde hacerlo
La hidrocolontoterapia se puede realizar en hospitales, clínicas o SPA's, pero en cualquier caso es muy importante acudir a un gastroenterólogo antes de realizar la hidrocolontoterapia para valorar si este tipo de procedimiento es seguro para cada situación.
Quien no debería hacer
La hidrocolonterapia se usa ampliamente para disminuir los síntomas de algunos problemas gastrointestinales, como intestino irritable, estreñimiento o hinchazón abdominal. Sin embargo, este tratamiento no debe usarse si la persona tiene:
- Enfermedad de Crohn;
- Hipertensión arterial no controlada;
- Hemorroides;
- Anemia severa;
- Hernias abdominales;
- Insuficiencia renal;
- Enfermedades del HIGADO.
- Sangrado intestinal.
Además, la hidrocolontoterapia tampoco debe realizarse durante el embarazo, especialmente si no hay conocimiento del obstetra.
Creado por: Equipo Editorial de Tua Saúde