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Para aliviar el dolor de oído en casa, lo que puedes hacer es tapar la zona con un paño tibio, porque el calor provocará vasodilatación, aliviando el dolor. Además, los remedios caseros, con aceite de oliva, ajo o manzanilla, también pueden ayudar a aliviar el dolor.
Cuando se sospecha que la causa del dolor de oído es la presencia de agua en el interior de la oreja, lo que se puede hacer es girar el cuello de lado, hacia el lado donde duele la oreja, y dar unos saltos sobre un pie, con la cabeza todavía inclinada hacia un lado para que salga el agua y pase el dolor de oído.
1. Solución de aceite de oliva y ajo
Las gotas de aceite de ajo son excelentes para ayudar a combatir las infecciones de oído, sin embargo, si la persona sospecha que tiene otitis externa, debe acudir al médico lo antes posible, pues el remedio casero no será suficiente para tratar la afección. infección.
Ingredientes
- 1 cabeza de ajo;
- Aceite de oliva;
- Algodón.
Modo de preparo
Picar una cabeza de ajo y colocar en un recipiente con suficiente aceite para taparlo y luego tapar y calentar a fuego lento durante aproximadamente una hora. Dejar enfriar, colar y guardar en nevera en botella de vidrio cerrada. Cuando lo use, simplemente caliente unas gotas en una cuchara de metal, pruebe la temperatura y sumerja una bola de algodón en el líquido y luego colóquela en la entrada del canal auditivo. Descubre todos los beneficios del ajo.
2. Solución de gordolobo o manzanilla
El gordolobo y la manzanilla tienen propiedades antiinflamatorias, calmantes y emolientes, por lo que son una buena opción para aliviar el dolor de oído.
Ingredientes
- Té de manzanilla o té de gordolobo;
- Algodón.
Modo de preparo
Prepare té de manzanilla o gordolobo y humedezca un pequeño trozo de algodón con un gotero. Aprieta para quitar el exceso y coloca el trozo de algodón, cubriendo la oreja.
El dolor de oído puede ser causado por una complicación después de un resfriado o gripe, cuando la secreción se acumula en el oído interno y, por lo tanto, mantener la nariz limpia con solución salina también es una estrategia muy importante, que ayuda a combatir las infecciones. por el oído. Beber mucha agua y tés durante el día también ayuda a fluidizar las secreciones, facilitando la limpieza de la nariz y la eliminación de las flemas.
Los síntomas que evidencian dolor de oído pueden ser disminución de la audición y fiebre. El niño que no sabe quejarse puede irritarse, postrarse, tener fiebre y llorar y gritar, sobre todo de noche, llevándose la mano al oído o tocándose la cabeza.
Qué no hacer
No se recomienda poner aceite, ajo u otro ingrediente directamente en el canal auditivo, a menos que lo recomiende el médico, siendo más seguro usar algodón empapado en esta u otra solución, siempre y cuando el trozo de algodón no esté demasiado húmedo.
Cuando ir al doctor
Si los síntomas persisten o empeoran, se recomienda la consulta con el médico, especialmente cuando se trata de un bebé o un niño. La fiebre es una señal de alarma y en ocasiones el pediatra puede indicar el uso de antibióticos, analgésicos y antiinflamatorios para controlar el dolor.
El médico observará la apariencia desde el interior del oído con un pequeño dispositivo propio, para determinar la gravedad de la situación, si el tímpano está afectado o si su membrana se ha roto. Además, esta pequeña evaluación ayuda a identificar si hay pus u otras complicaciones involucradas, para determinar el tratamiento.
Creado por: Equipo Editorial de Tua Saúde