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Para detener rápidamente los episodios de hipo, que ocurren debido a una contracción rápida e involuntaria del diafragma, es posible seguir algunos consejos que hacen que los nervios y músculos de la región del pecho vuelvan a trabajar al ritmo adecuado. Algunos de estos consejos son beber agua fría, contener la respiración unos segundos y dejarla salir lentamente.
Cuando el hipo es persistente y dura más de 1 día, es necesario consultar a un médico de cabecera para valorar las causas del hipo e indicar un tratamiento con medicamentos adecuados, que pueden ser gabapentina, metoclopramida y baclofeno.
Así, para detener el hipo de forma efectiva y definitiva, es importante eliminar su causa, que puede ser la dilatación del estómago por comer en exceso o en exceso, ingestión de bebidas alcohólicas e incluso enfermedades cerebrales, como la meningitis, por ejemplo. Para comprenderlo mejor, consulte las causas del hipo.
9 consejos para detener el hipo
Los hipo suelen durar unos segundos, y se pueden realizar técnicas caseras para hacerlos desaparecer más rápidamente. Estas técnicas son populares y no todas tienen pruebas científicas, y los resultados pueden variar de persona a persona. Estos consejos son más útiles en casos de hipo repentino y poco frecuente y pueden ser:
- Beba un vaso de agua fría o chupe hielo, ya que estimula los nervios del pecho;
- Coloque una compresa fría en su cara para ayudar a controlar su respiración;
- Aguante la respiración tanto como pueda o respire en una bolsa de papel, ya que aumenta los niveles de CO2 en la sangre y estimula el sistema nervioso;
- Respire profunda y lentamente, para estirar el diafragma y los músculos respiratorios;
- Asuste, ya que libera adrenalina que interfiere con el funcionamiento del cerebro y estimula los nervios musculares;
- Realice movimientos de salpicadura, ya que esto ayuda a que el diafragma vuelva a funcionar correctamente;
- Beba un poco de agua con el tronco inclinado hacia adelante o boca abajo, ya que esto relaja el diafragma;
- Cubrir la nariz y hacer fuerza para liberar el aire contrayendo el pecho, llamada maniobra de Valsalva, que es otra forma de estimular los nervios del pecho;
- Consume una cucharada de azúcar, miel, limón, jengibre o vinagre, ya que son sustancias que estimulan las papilas gustativas, sobrecargan los nervios de la boca y ocupan el cerebro con otros estímulos, haciendo que el diafragma se relaje.
En el bebé recién nacido o incluso dentro del útero de la madre, el hipo puede deberse a que el diafragma y los músculos respiratorios aún se están desarrollando y el reflujo después de la lactancia es muy común. En estos casos, se recomienda amamantar al niño o, si el estómago ya está lleno, eructar. Vea más cómo detener el hipo en los bebés.
Cómo prevenir los episodios de hipo
No existe un método específico para prevenir la aparición del hipo, sin embargo, es posible tomar algunas medidas que ayuden a reducir las posibilidades de episodios de hipo. Estas medidas están relacionadas con cambios en el estilo de vida como beber menos alcohol, comer más lentamente y en porciones más pequeñas y evitar las comidas picantes.
Además, algunos estudios muestran que la meditación, con técnicas de relajación, la reducción del estrés y la acupuntura pueden ayudar a reducir los ataques de hipo. Vea más otros beneficios de la acupuntura.
Cuando ir al doctor
Si el hipo dura más de 1 día, es necesario consultar a un médico de cabecera, ya que puede ser un hipo persistente o crónico provocado por infecciones, inflamación, enfermedades gastrointestinales o por el uso de determinados medicamentos. En estas situaciones, el médico puede solicitar pruebas para investigar la causa del hipo que no cesa.
El médico también puede prescribir algún medicamento para tratar el hipo de forma más intensa, como clorpromazina, haloperidol, metoclopramida y, en casos más graves, fenitoína, gabapentina o baclofeno, por ejemplo. Comprende cómo se realiza el tratamiento del hipo.