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La lipocavitación es un tratamiento estético indicado para eliminar la grasa localizada y la celulitis, especialmente en las regiones del vientre, muslos, flancos y espalda, que no duele y ayuda a moldear y definir el cuerpo. La lipocavitación se realiza mediante un dispositivo de ultrasonido, que ayuda a destruir la grasa acumulada localmente. Este tratamiento es seguro y no tiene riesgos para la salud, no provoca quemaduras, ni aumenta el colesterol, pero debe realizarse con un profesional capacitado para que el procedimiento tenga el efecto esperado.
Como ocurre con todo el procedimiento estético, siempre existe el riesgo de no funcionar o no obtener los resultados esperados, y esto puede suceder cuando la persona no sigue todas las pautas necesarias durante su período de tratamiento, que incluye beber abundante agua y té verde, comer bien y es fundamental tener drenaje linfático y ejercicio de intensidad moderada o alta dentro de las 48 horas posteriores a cada sesión de lipocavitación.
Pero para que este tratamiento esté libre de riesgos, es necesario seguir sus contraindicaciones.
Contraindicaciones para la lipocavitación
Si bien la lipocavitación es un procedimiento con pocos riesgos, está contraindicado en algunos casos específicos, como:
- Durante el embarazo, porque por falta de evidencia científica, se desconoce si el procedimiento es peligroso para el feto, aunque se ha comprobado que aumenta la temperatura de la región tratada;
- Enfermedad cardíaca, porque el equipo puede generar arritmias cardíacas en determinadas personas;
- La obesidad, ya que no es un procedimiento para adelgazar, solo para modelar regiones específicas del cuerpo;
- Epilepsia, ya que existe riesgo de convulsiones durante el procedimiento;
- Cuando existan heridas o procesos infecciosos en la región a tratar;
- En el caso de prótesis, placas, tornillos metálicos o DIU en el cuerpo, ya que el metal puede calentarse durante el tratamiento;
- Cuando existen varices o venas dilatadas en la región a tratar, ya que existe el riesgo de que el tratamiento empeore las varices.
Además, este tratamiento estético tampoco debe ser realizado por pacientes con enfermedad renal o hepática, sin antes consultar al médico.