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Durante todo el embarazo es necesario prestar especial atención a la salud porque pueden aparecer algunos signos de alarma que indiquen la presencia de complicaciones, como preeclampsia, diabetes gestacional.
Los signos de advertencia más comunes son aumento de la presión arterial, fiebre, vómitos persistentes y sangrado vaginal, por lo que es importante consultar a su médico para realizar pruebas de diagnóstico y ver qué está causando el problema.
Esto es lo que debe hacer de acuerdo con cada señal de advertencia:
1. Pérdida de sangre a través de la vagina
Cuando el sangrado ocurre durante el primer trimestre, puede ser un síntoma de un aborto espontáneo o un embarazo ectópico.
Sin embargo, la pérdida de sangre a través de la vagina en cualquier trimestre del embarazo también puede indicar problemas con la placenta o parto prematuro, especialmente cuando se acompaña de dolor abdominal o de espalda.
Qué hacer: consulte al médico para que pueda evaluar la salud del feto mediante un examen de ultrasonido. Además, es importante descansar lo máximo posible para evitar más hemorragias.
2. Fuerte dolor de cabeza o visión borrosa
El dolor de cabeza severo y persistente o la visión alterada durante más de 2 horas pueden ser síntomas de preeclampsia, una complicación del embarazo que se caracteriza por presión arterial alta, hinchazón del cuerpo y pérdida de proteínas en la orina, que puede causar un parto prematuro. o muerte del feto.
Qué hacer: Procura descansar y quedarte en un lugar tranquilo y oscuro, además de tomar tés para aliviar el dolor, como la manzanilla. Sin embargo, es importante acudir al médico de inmediato para que pueda evaluar la presión y hacer análisis de sangre y ecografía obstétrica doppler, iniciando de inmediato el tratamiento adecuado si se diagnostica preeclampsia. Ver más en: Cómo combatir el dolor de cabeza durante el embarazo.
3. Dolor de estómago fuerte y persistente
Si el dolor de estómago es severo y dura más de 2 horas, también puede ser un signo de preeclampsia, especialmente si se acompaña de otros síntomas como hinchazón del cuerpo, dolor de cabeza o cambios en la visión.
Qué hacer: Para tratar de aliviar el dolor, conviene beber té de jengibre e ingerir alimentos ligeros y de fácil digestión, evitando frituras, salsas y carnes rojas. Sin embargo, si los síntomas persisten durante más de 2 horas, consulte con un médico.
4. Vómitos persistentes
Los vómitos frecuentes pueden causar deshidratación y afectar el aumento de peso deseable durante el embarazo, lo que puede impedir que el bebé se desarrolle adecuadamente.
Qué hacer: Para aliviar los vómitos conviene comer alimentos secos y de fácil digestión, como galletas sin relleno, arroz bien cocido y pan blanco. También debe beber al menos 2 litros de agua al día, evitar las especias fuertes y beber té de jengibre por la mañana. Vea más consejos en: Cómo aliviar la enfermedad común del embarazo.
5. Fiebre superior a 37,5ºC
La fiebre alta puede ser síntoma de una infección en el cuerpo, generalmente causada por la presencia de enfermedades como la gripe o el dengue.
Qué hacer: Beba muchos líquidos, descanse, colóquese compresas de agua fría en la cabeza, el cuello y las axilas y, por lo general, tome paracetamol para aliviar la fiebre. Además, es importante llamar al médico y advertirle de la fiebre, y si la temperatura supera los 39ºC se debe acudir a urgencias.
6. Ardor o dolor al orinar
El ardor, el dolor y la urgencia de orinar son los principales síntomas de la infección del tracto urinario, una enfermedad muy común en el embarazo, pero si no se trata puede causar complicaciones como un parto prematuro y un crecimiento reducido del bebé.
Qué hacer: Beba al menos 2 litros de agua al día, lávese bien las manos antes y después de ir al baño y no retenga la orina durante mucho tiempo. Además, debe consultar a su médico para que le recete antibióticos para combatir las infecciones y prevenir complicaciones. Obtenga más información sobre la infección del tracto urinario durante el embarazo.
7. Flujo vaginal con comezón o maloliente
El flujo vaginal con picazón o mal olor es un indicador de candidiasis o infección vaginal, problemas comunes en el embarazo debido a un cambio en el pH vaginal con las hormonas del embarazo.
Qué hacer: consulte a su médico para confirmar el diagnóstico y comenzar el tratamiento con ungüentos o remedios antimicóticos o antibióticos. Además, es importante llevar siempre bragas de algodón y evitar prendas muy ajustadas y protectores diarios, ya que favorecen el desarrollo de infecciones.
8. Dolor intenso en la parte inferior del abdomen
La presencia de dolor severo en la parte baja del abdomen puede ser signo de embarazo ectópico, aborto espontáneo, parto prematuro, mioma o desprendimiento de placenta.
Qué hacer: consulte al médico para identificar la causa del dolor y descanse tanto como sea posible hasta que comience el tratamiento adecuado.
9. Disminución de los movimientos fetales
La ausencia o reducción abrupta de los movimientos del bebé durante al menos 12h puede indicar que el bebé está recibiendo menos oxígeno o nutrientes, lo que puede provocar un parto prematuro o problemas neurológicos en el bebé.
Qué hacer: Animar al bebé a moverse, comer, caminar o acostarse con las piernas en alto, pero si no se detecta ningún movimiento se debe consultar al médico para evaluar la salud del bebé mediante ecografías. Ver más en: Cuando la disminución de los movimientos del bebé en el vientre es preocupante.
10. Aumento de peso exagerado y aumento de la sed
El aumento excesivo de peso, el aumento de la sed y las ganas de orinar pueden ser signos de diabetes gestacional, una enfermedad que puede provocar un parto prematuro y complicaciones de salud para el bebé.
Qué hacer: consulte a su médico para medir su nivel de glucosa en sangre y comenzar el tratamiento adecuado con cambios en la dieta, el uso de medicamentos y, si es necesario, el uso de insulina.
Es importante recordar que ante la presencia de cualquier signo de alarma, aunque mejoren los síntomas, se debe informar al médico para que se realice el tratamiento adecuado y que se programen citas de seguimiento para evaluar la evolución del problema y la salud del bebé.