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El tratamiento de las varices pélvicas, que son venas dilatadas en la región pélvica, tiene como objetivo disminuir síntomas como dolor en la región pélvica, dolor durante el coito y sensación de pesadez o hinchazón en la región íntima, y se puede realizar con:
- Analgésicos y varices recetados por el angiólogo o cirujano vascular.
- Cirugía
- Técnica de embolización
Además, durante el tratamiento de las varices pélvicas también es importante adoptar algunas precauciones como usar medias elásticas de compresión y hacer ejercicio con regularidad para promover la compresión de las venas y mejorar el retorno de la sangre venosa al corazón.
Cirugía de varices pélvicas
En la cirugía para las varices pélvicas, el médico "anuda" las venas afectadas, lo que hace que la sangre circule solo en las venas que están sanas. Esta cirugía requiere hospitalización y se realiza bajo anestesia general.
En los casos en que esta cirugía o embolización no sea efectiva, puede ser necesario someterse a una cirugía para extirpar las venas varicosas o para extirpar el útero o los ovarios.
Técnica de embolización para varices pélvicas
La embolización consiste en colocar pequeños resortes dentro de las venas pélvicas dilatadas, para bloquear el suministro de sangre a las venas y así reducir los síntomas. Para ello, el médico tiene que insertar una aguja en las venas de la región pélvica, insertar un catéter y solo entonces insertar los "resortes".
La embolización se realiza con anestesia local y sedación, dura alrededor de 1 a 3 horas y generalmente no es necesaria la hospitalización. Además, se pueden utilizar escleroterapia con espuma u otros embolizantes como Gelfoam o Cyanoacrylate para ayudar a ocluir las venas afectadas.
Después del procedimiento, es normal que el paciente experimente dolor e incomodidad en la región pélvica y que el lugar de colocación del catéter se vuelva violeta.
Qué hacer durante el tratamiento de las várices pélvicas.
Durante el tratamiento de las varices pélvicas, el paciente debe tomar algunas precauciones como:
- Use medias de compresión elásticas;
- Coloque una cuña al pie de la cama;
- Evite sentarse o estar de pie durante mucho tiempo;
- Practica actividad física con regularidad.
Este cuidado ayuda a comprimir las venas y devolver la sangre al corazón.
Signos de mejora
Los signos de mejoría aparecen con el tratamiento e incluyen disminución del dolor en el área pélvica, dolor durante el contacto íntimo y reducción de la hinchazón y pesadez en la región íntima.
Signos de empeoramiento
Los signos de empeoramiento aparecen cuando no se realiza el tratamiento e incluyen aumento del dolor en el área pélvica, dolor durante las relaciones sexuales y aumento de la hinchazón y pesadez en el área íntima.
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