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El bebé puede comenzar a caminar alrededor de los 9 meses de edad, pero lo más común es que el niño comience a caminar a la edad de 1 año, sin embargo, es normal que el bebé tarde hasta 18 meses en caminar sin que sea necesario. no es motivo de preocupación para los padres porque normalmente no representa un problema de salud.
Los padres solo deben preocuparse si el bebé tiene más de 18 meses y no muestra interés en caminar o si después de los 15 meses el bebé también tiene otros retrasos en el desarrollo, como no poder sentarse ni gatear, por ejemplo. En este caso, el pediatra podrá evaluar al bebé y solicitar pruebas que puedan identificar la causa de este retraso en el desarrollo.
5 juegos para ayudar al bebé a caminar más rápido
Estos juegos se pueden realizar de forma natural, durante el tiempo que los padres tienen para cuidar al bebé y se pueden utilizar si el bebé ya se sienta solo, sin necesidad de ningún apoyo y si además demuestra que tiene fuerza en las piernas y puede moverse, incluso si no gatea muy bien, pero no es necesario hacerlo antes de que el bebé haya cumplido los 9 meses.
- Sostenga las manitas del bebé mientras está de pie en el piso y camine con él dando algunos pasos. Tenga cuidado de no cansar demasiado al bebé y no fuerce las articulaciones de los hombros tirando del bebé demasiado fuerte o demasiado rápido para que pueda caminar.
- Si el bebé está de pie en el sofá o en una mesa de apoyo firme, coloque un juguete en el extremo del sofá para que se sienta atraído por el juguete y trate de alcanzarlo caminando.
- Con el bebé acostado en el piso de espaldas, apoye sus manos en sus pies para que pueda empujar, empujando sus manos. Este juego es uno de los favoritos de los bebés y es ideal para desarrollar la fuerza muscular y fortalecer las articulaciones de los tobillos, las rodillas y las caderas.
- Ofrézcale juguetes que se puedan empujar en posición vertical, como un carrito de muñecas, un supermercado o carritos de limpieza, para que pueda empujar por la casa todo lo que quiera y cuando quiera.
- Párese a dos pasos frente al bebé y dígale que se acerque solo a usted. Con una mirada tierna y la alegría en su rostro se sentirá seguro tratando de llegar a ti. Dado que el bebé puede caerse, puede ser una buena idea probar este juego en el césped, porque de esa manera si se cae, es menos probable que se lastime.
Si el bebé se cae debes sostenerlo con cuidado, sin asustarlo para que no tenga miedo de volver a caminar solo.
Todos los bebés recién nacidos hasta los 4 meses de edad, cuando se les sujeta por las axilas y con los pies apoyados en cualquier superficie, parecen querer caminar. Este es el reflejo de la marcha, que es natural en los seres humanos y tiende a desaparecer a los 5 meses.
Vea más juegos que ayudan al desarrollo del bebé en este video:
Cuidado para proteger al bebé que está aprendiendo a caminar
El bebé que está aprendiendo a caminar no debe permanecer en un andador, porque este equipo está contraindicado porque puede afectar el desarrollo del niño, provocando que el niño camine más tarde. Comprenda por qué esto puede suceder aquí.
Cuando el bebé todavía está aprendiendo a caminar puede caminar descalzo por el interior de la casa y por la playa, en los días más fríos los calcetines antideslizantes son una gran opción porque los pies no se enfrían y el bebé se siente mejor en el suelo, facilitando la marcha. así.
Una vez que haya dominado el arte de caminar solo, deberá usar zapatos adecuados que no obstaculicen el desarrollo de sus pies, lo que le brindará más seguridad al niño para caminar. El zapato debe ser del tamaño correcto y no debe ser demasiado pequeño ni demasiado holgado para que el bebé camine con más firmeza. Por lo tanto, mientras el bebé no camine con seguridad, lo mejor es no usar pantuflas, solo si tienen elásticos en la espalda. Vea otras características del zapato ideal aquí.
Los padres siempre necesitan acompañar al bebé donde sea que esté porque esta fase es muy peligrosa y en cuanto el bebé comienza a caminar puede llegar a cualquier parte de la casa, que puede que no haya llegado simplemente gateando. Es bueno estar atento a las escaleras, colocar una pequeña puerta en la parte inferior o superior de las escaleras puede ser una buena solución para evitar que el niño suba o baje las escaleras solo y se lastime.
Aunque al bebé no le gusta estar atrapado en una cuna o en una pocilga, los padres deben limitar dónde pueden estar. Cerrar las puertas de la habitación puede ser útil para que el niño no esté solo en ninguna habitación. También es importante proteger la esquina del mueble con pequeños soportes para que no golpee la cabeza allí.