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La diabetes insípida es una alteración en la concentración de la orina, lo que la hace en exceso de agua y provoca deshidratación y mucha sed. Esto sucede al disminuir la producción de hormona antidiurética, o ADH, debido a cambios en el sistema nervioso central o cambios en su acción, debido a insuficiencia renal.
Esta diabetes no forma parte de los tipos de diabetes mellitus, que se deben al aumento de la glucosa en sangre. Si desea conocer los tipos de diabetes mellitus, consulte aquí.
Así, las principales causas de la diabetes insípida son:
1. Diabetes insípida central
La diabetes insípida central es causada por cambios en la región del cerebro llamada hipotálamo, que pierde su capacidad para producir la hormona ADH, también llamada vasopresina, y las principales causas son:
- Cirugías cerebrales;
- Trauma de la cabeza;
- Tumor cerebral o aneurisma;
- Enfermedades autoinmunes;
- Enfermedades genéticas;
- Infecciones en el cerebro;
- Obstrucción de los vasos sanguíneos que irrigan el cerebro.
Sin niveles adecuados de ADH estimulada por el cerebro, los riñones no pueden controlar la producción de orina, que se forma en grandes cantidades, alcanzando varios litros por día.
2. Diabetes insípida nefrogénica
La diabetes insípida nefrogénica ocurre cuando la concentración de la hormona antidiurética en la sangre es normal, pero los riñones no responden normalmente. Las principales causas son:
- Uso de medicamentos, como litio, rifampicina, gentamicina o contrastes de prueba, por ejemplo;
- Poliquistosis renal;
- Infecciones renales graves;
- Cambios en los niveles de potasio en sangre;
- Enfermedades tales como anemia de células falciformes, mieloma múltiple, amiloidosis, sarcoidosis, por ejemplo;
- Post-trasplante renal;
- Cancer de RIÑON;
- El embarazo;
- Causas poco claras o idiopáticas.
Además, existen causas genéticas para la diabetes insípida nefrogénica, que son más raras y más graves, ya que ocurren desde la infancia.
Los síntomas de la diabetes insípida
La persona con diabetes insípida tiene síntomas como sed excesiva y exceso de orina, lo que provoca la necesidad de una gran ingesta de líquidos. Además, con el tiempo, el consumo excesivo de líquidos provoca un empeoramiento de la sensibilidad y una producción cada vez menor de la hormona antidiurética.
Por tanto, los síntomas son:
- Exceso de orina: producción de grandes volúmenes de orina, especialmente durante la noche. Por ejemplo, un paciente de 70 kg puede orinar más de 3,5 litros de orina en un día.
- Sed incontrolable: se estimula la sed anormal con el consiguiente aumento de la ingesta de líquidos.
Para diagnosticar esta enfermedad, el médico debe ordenar análisis de orina para evaluar su densidad, además de análisis de sangre para evaluar los valores de sodio y potasio. Se pueden realizar imágenes de resonancia magnética del cerebro para evaluar los cambios en el cerebro que pueden desencadenar la diabetes insípida.
Tratamiento para la diabetes insípida
El tratamiento de la diabetes insípida depende de la gravedad de la enfermedad de cada persona y del tipo, que puede curarse o persistir durante algún tiempo. Los casos leves y moderados se pueden controlar con una dieta baja en sal y el uso de algunos diuréticos tiazídicos, que ayudan a controlar la concentración de la orina, con hidroclorotiazida, por ejemplo, u otros medicamentos como clorpropamida, carbamazepinas o antiinflamatorios.
En casos más graves, y de causa central, puede ser necesaria la reposición de ADH, a través del medicamento desmopresina o DDAVP, que puede administrarse por vía intravenosa, por vía oral o por inhalación.
Además, cuando sea posible, es importante controlar los problemas que están causando la diabetes insípida, como el uso de medicamentos e infecciones, por ejemplo.