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El DMAA es una sustancia presente en la composición de algunos suplementos dietéticos, siendo ampliamente utilizada como pre-entrenamiento por personas que practican actividades físicas, ya que esta sustancia es capaz de promover la pérdida de grasa y asegurar una mayor energía para realizar el ejercicio.
Aunque puede ayudar en el proceso de adelgazamiento, la distribución, comercialización, difusión y uso de productos que contienen DMAA ha sido suspendida por ANVISA desde 2013 debido a que actúa directamente sobre el sistema nervioso central y aumenta el riesgo de desarrollar enfermedades cardíacas, hepáticas y renales, por ejemplo. ejemplo.
Además, dosis crónicas o elevadas de esta sustancia pueden provocar adicción, por lo que se recomienda no consumir productos que contengan DMAA en su composición.
Efectos secundarios de DMAA
Los efectos secundarios de la DMAA se asocian principalmente con el consumo crónico de dosis altas y con otras sustancias estimulantes, como el alcohol o la cafeína, por ejemplo.
El principal mecanismo de acción de DMAA es la vasoconstricción, por lo que los efectos adversos del uso frecuente de DMAA comienzan con el aumento brusco de presión, además de lo siguiente:
- Dolor de cabeza intenso;
- Náusea;
- Agitación;
- Convulsiones;
- Hemorragia cerebral o accidente cerebrovascular;
- Insuficiencia renal;
- Daño hepático;
- Cambios cardiacos;
- Deshidración.
Aunque DMAA se incluyó originalmente en algunos suplementos dietéticos, está contraindicado para uso humano debido a sus graves efectos sobre la salud.
Cómo funciona DMAA
El mecanismo de acción de DMAA todavía se discute ampliamente, sin embargo, se cree que esta sustancia actúa como estimulante del sistema nervioso central y conduce a una mayor producción de norepinefrina y dopamina. La mayor cantidad de norepinefrina circulante estimula la descomposición de las moléculas de grasa, proporcionando energía extra para la actividad física y ayudando al proceso de pérdida de peso.
Además, el aumento de la cantidad de dopamina circulante disminuye la sensación de cansancio, aumenta la concentración durante el entrenamiento y aumenta el intercambio de gases, aportando una mayor cantidad de oxígeno a los músculos.
Sin embargo, debido a su acción sobre el sistema nervioso, es posible que el uso frecuente y en dosis elevadas de esta sustancia, especialmente cuando se consume junto con otras sustancias estimulantes como la cafeína, por ejemplo, pueda resultar en dependencia e insuficiencia hepática y alteraciones cardíacas. por ejemplo.