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Los ejercicios de propiocepción aceleran la recuperación de lesiones en la articulación, ligamentos, músculos o tendones del hombro porque ayudan al cuerpo a adaptarse al miembro afectado, evitando esfuerzos innecesarios durante las actividades diarias, como mover el brazo, recoger objetos o limpiar la casa, por ejemplo.
Normalmente, los ejercicios de propiocepción del hombro deben realizarse diariamente durante 1 a 6 meses, hasta que pueda realizar los ejercicios sin dificultad o hasta que el ortopedista o fisioterapeuta lo recomiende.
La propiocepción del hombro se utiliza no solo en la recuperación de lesiones deportivas como ictus, luxaciones o bursitis, sino en la recuperación de cirugías ortopédicas o en las lesiones más sencillas, como la tendinitis del hombro, por ejemplo.
Cómo hacer ejercicios de propiocepción para el hombro.
Algunos ejercicios de propiocepción utilizados en la recuperación del hombro incluyen:
Ejercicio 1:
Ejercicio 1
Permanezca en la posición de cuatro apoyos, como se muestra en la imagen 1, luego levante el brazo sin lesionarse, cierre los ojos y mantenga la posición por 30 segundos, repitiendo 3 veces;
Ejercicio 2:
Ejercicio 2
Párese frente a una pared y con una pelota de tenis en la mano del hombro afectado. Luego levante un pie y mantenga el equilibrio mientras lanza la pelota contra la pared 20 veces. Repita el ejercicio 4 veces y, cada vez, cambie el pie que está levantado;
Ejercicio 3:
Ejercicio 3
Párese y sostenga, con el brazo del hombro afectado, un balón de fútbol contra una pared, como se muestra en la imagen 2. Luego, realice movimientos de rotación con el balón, evitando doblar el brazo, durante 30 segundos y repitiendo 3 veces.
Estos ejercicios deben, siempre que sea posible, ser guiados por un fisioterapeuta para adaptar el ejercicio a la lesión concreta y adaptarse a la etapa de evolución de la recuperación, aumentando los resultados.