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Una gran solución casera para la bursitis es poner hielo en el lugar. El hielo actúa como analgésico local y es antiinflamatorio y debe usarse todos los días durante el tratamiento de la bursitis, para complementar el tratamiento fisioterapéutico y farmacológico, haciendo que la cura de la bursitis sea cada vez más cercana.
Cómo usar hielo para tratar la bursitis
Para usar hielo para tratar la bursitis, es importante seguir las siguientes pautas:
- Coloque guijarros de hielo envueltos en un pañal, o una tela fina, y colóquelos sobre su hombro, dejándolos ahí por 10 minutos.
- Después de 10 minutos con hielo, retire y descanse durante otros 10 minutos, luego vuelva a colocar el hielo en su hombro. Repita este proceso 3 veces y realice todo el procedimiento dos veces al día, o según las instrucciones del médico o fisioterapeuta.
El tratamiento de la bursitis todavía implica salvar la articulación afectada. Por lo tanto, se debe descansar siempre que sea posible y tener cuidado de no llevar una bolsa pesada en el hombro afectado por la bursitis, y de no acostarse del lado donde está la bursitis en la cadera, por ejemplo. Este tipo de cuidados es muy importante para reducir la presión de diferentes estructuras sobre la bursa y sobre la articulación, facilitando la curación de la enfermedad.
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